DEBATE 150: «Estar colgados de la nube» (4º de la 1ª Evaluación)
Martin L. Kutscher, autor de Niños conectados, escribió: «Numerosos estudios revelan que la mayoría de los estudiantes dicen que usan los dispositivos electrónicos durante la clase para mandar o recibir mensajes de texto, navegar o consumir contenidos multimedia. Los resultados de estos estudios coinciden con los de mi propia investigación informal de pacientes que, al ser preguntados, afirman, casi todos, que en sus clases los estudiantes usan los portátiles o los iPads para actividades que nada tienen que ver con la enseñanza».
Lo cual equivale a afirmar que, durante las horas de asistencia obligatoria al centro de enseñanza, realmente no están allí: no atienden, están por otra cosa mucho más poderosa que una clase o un proyecto o una actividad competencial. Desde luego, preocuparnos por el modo de enseñar o evaluar, sin pensar antes cómo empezar a revertir la situación, no ayudará a nuestros jóvenes. Antes de plantearnos cómo debemos dar nuestras clases, tendríamos que ingeniárnoslas para conseguir, de algún modo, que tuviéramos estudiantes reales, quiero decir, personas que necesitan aprender y que tienen intención de prestar atención a lo que sucede en su entorno real.
Tomado de Andreu Navarra “Devaluación continua”
Aunque este problema podría haber tenido muy fácil solución hace unos años (prohibir los aparatos electrónicos), ahora mismo es casi imposible de solucionar. Muchos colegios por no decir todos, han eliminado gran parte de los libros y han digitalizado la forma de impartir la materia. Esto quiere decir que el alumno debería llevar un dispositivo electrónico a clase. Aunque se prohíba el uso de los teléfonos móviles, seguirán teniendo el ordenador o la tablet que supuestamente usan para aprender, pero que puede convertirse en un universo de distracción.
Y eso (la tenencia de dispositivos electrónicos) ¿ayuda al trabajo intelectual para lo que se va a un centro educativo?… ¿Fomentar la «rapidez» (una de sus ventajas) ayuda a la reflexión como base del aprendizaje?
Es indudable que los dispositivos electrónicos aportan beneficios en cuanto a su uso en el colegio. Entre otras cosas, nos sirven para buscar explicaciones, sinónimos, etc. de aquellos conceptos o temas que no entendamos. También sirven para hacer las clases más interactivas y menos aburridas además de permitirnos trabajar en un menor tiempo y entre varias personas sin necesidad de armar jaleo.
Como bien dice el texto muchas veces se usan para mandar o recibir mensajes de texto, navegar o consumir contenidos multimedia. Pero en mi opinión, la culpa de esa distracción no recae solo sobre los alumnos. Si preguntásemos entre los estudiantes, concluiríamos que cuanto más claras sean las explicaciones que un profesor dé y más dinámicas sean las clases, mayor interés van a tener por la asignatura. Además, si se nota que el profesor se interesa por su asignatura y está dispuesto a resolver cualquier tipo de duda, los alumnos no van a tener tanta tendencia de mirar sus dispositivos electrónicos o de querer distraerse y por tanto, aprenderán más.
Cita Naia, de pasada, el tema del «aburrimiento» y lo hace como algo negativo. No lo tengo yo tan claro. En mi opinión todo aprendizaje conlleva rutinas y aprenderlas es, en ocasiones, aburrido. Por ello, es importante, en ocasiones, aburrirse… (¿¿¿???)…
Se ha aumentado tanto el uso de los dispositivos electrónicos en nuestro día a día que se han convertido prácticamente necesarios en el ámbito académico. Gracias a esto, podemos encontrar información de una manera más rápida, buscar explicaciones a temas que no encontramos y hasta podemos sustituir los libros, de tal manera que con tan solo un ordenador o móvil podríamos tener toda lo necesario. Sin embargo, un uso desmesurado de estas tecnologías puede llevar a diferentes desventajas como, por ejemplo, una mayor distracción en las aulas, lo que puede llevar a un menor rendimiento académico, como es obvio. Como ya he dicho, este modo de aprender se ha convertido casi imprescindible y, aunque es cierto que puede llevar a problemas, opino que, si se hace un buen uso de estos aparatos, puede aportarnos más beneficios que desventajas y por ello pienso que son una buena herramienta para ayudarnos académicamente.
Bien es cierto que, vistas las oportunidades que nos brindan los dispositivos electrónicos en casi cualquier aspecto, es prácticamente inevitable la tentación de distraerse. Sin embargo, creo que el problema de los alumnos que «no están» podría tener origen en la propia forma de dar clase, más allá de los dispositivos. Por experiencia, puedo decir que hay clases en las que, por la forma que son impartidas, una gran mayoría de alumnos acaban hartos de la lección, mientras que en otras se consigue captar el interés y la atención de la mayor parte de la clase. El riesgo de distracción por las nuevas tecnologías sigue ahí, pero creo que un eficiente sistema para enseñar la lección (tanto entretenido como estricto cuando sea necesario) es la clave para evitar esa tendencia a usar sus dispositivos con el objetivo de evadirse de la aburrida lección.
Siento no coincidir con Xabier. Un «profesor» (yo, al menos) no va a clase a «divertir» a la tropa sino a «impartir» una materia porque una clase no es un Club de Tiempo Libre sino un espacio de aprendizaje. Desgraciadamente nuestra legislación ha ido creando esta mentira y, por ello, la actitud del alumno/a no es la de quien viene a «aprender» sino a «pasar el rato»…¡Eso sí… tienen que aprobrarme por el hecho de asistir!… Puedo coincidir en la importancia de «saber hacerlo», de la «motivación»… etc… pero esas son cuestiones que deben aclararse fuera del centro escolar…
En mi opinión la distracción de los alumnos con las nuevas tecnologías en clase se puede deber a dos razones diferentes bien a la adicción que tiene una gran parte de los jóvenes a las nuevas tecnologías y a las redes sociales o bien a la clase que estén dando ya que en mi opinión muchas de las clases impartidas a día de hoy son aburridas lo que en mi opinión es algo malo porque aunque la materia que se imparta o los métodos de estudio sean rutinarios el profesor que imparta la clase puede hacer que esta materia a estudiar sea interesante para el alumnado y que los alumnos no vayan a estudiar para los exámenes, que vayan a aprender porque les interesa y que los exámenes solo sean una forma de retar lo que han aprendido y lo que tienen que aprender, que la materia la estudien porque les gusta la asignatura y quieren aprender no para poder llegar a una carrera determinada mediante la nota de unos exámenes que representan tu «inteligencia».
En mi opinión la distracción de los alumnos con las nuevas tecnologías en clase se puede deber a dos razones diferentes bien a la adicción que tiene una gran parte de los jóvenes a las nuevas tecnologías y a las redes sociales o bien a la clase que estén dando ya que en mi opinión muchas de las clases impartidas a día de hoy son aburridas lo que en mi opinión es algo malo porque aunque la materia que se imparta o los métodos de estudio sean rutinarios el profesor que imparta la clase puede hacer que esta materia a estudiar sea interesante para el alumnado y que los alumnos no vayan a estudiar para los exámenes, que vayan a aprender porque les interesa y que los exámenes solo sean una forma de retar lo que han aprendido y lo que tienen que aprender, que la materia la estudien porque les gusta la asignatura y quieren aprender no para poder llegar a una carrera determinada mediante la nota de unos exámenes que representan tu «inteligencia».
Si que es cierto que la introducción de los aparatos electrónicos al colegio ha traído muchas ventajas y desventajas. Una de esas desventajas es , como inidica en el texto, la distracción que tienen gran parte de alumnos en medio de las clases por culpa de estar con el móvil u ordenador. Aunque , normalmente cuando los alumnos no prestán atención y están con estos aparatos, es porque dicha asignatura no les ineteresa y no les va a servir de nada en un futuro o porque la manera de impartir la clase por parte del profesor no es nada amena ni dinámica. Por tanto, una parte de la culpa la tiene el sistema educatvio actual o el profesor que de una clase aburrida o sin expliaciones.
Es evidente que el uso de los teléfonos móviles y otros dispositivos electrónicos en el aula pueden llegar a ser muy perjudiciales para la concentración del alumnado. Pero si damos un buen uso a las nueva tecnologías estas pueden ser de gran ayuda para estudiar, buscar información, buscar opiniones respecto un tema…
Yo creo que tenemos una edad en la que a pesar de no ser adultos, ya deberíamos saber lo que tenemos que hacer y lo que nos conviene. Es decir, si una persona decide perder el tiempo lo va a perder teniendo un Ipad o sin tenerlo ( quiero decir, que el que no tiene interés en aprender no lo va a tener de ninguna manera). Por eso creo que el uso de los móviles es responsabilidad de cada uno y si decides coger el móvil para divertirte en clase en vez de atender, la única persona perjudicada vas a ser tú.
También creo, al igual que mis compañeros, que el sistema educativo no ayuda ya que estamos siendo evaluados por una nota sobre una asignatura que puede llegar a resultar muy pesada, en vez de ser evaluados por nuestras cualidades personales.
Aunque los aparatos electrónicos estén muy presentes en nuestro día a día, a veces las nota, estar atento en clase y algunas otras cosas del ámbito académico no dependen exclusivamente de los aparatos ya antes mencionados. Ya que creo que a veces existe la desmotivación de los alumnos por cosas extra-escolares. Aún así opino que el problema con el uso de los móviles podía haber sido mucho más fácil de solventar ya que en estos tiempos en los que vivimos la mayoría de colegios han digitalizado los libros y hasta piden que llevemos un ordenador.
Cuando se permite el uso de los dispositivos móviles durante el transcurso de las clases, también se corre el riesgo de que ese uso que le demos los alumnos no sea el adecuado. En mi humilde opinión, las ventajas que proporcionan a la enseñanza la funcionalidad de estos aparatos electrónicos superan notablemente a los conflictos que estos puedan acarrear. De siempre se ha dicho que la persona que quiere estudiar/trabajar lo va ha hacer y la que no, no, da igual los medios que le facilites o las diferentes opciones que le propongas, su actitud ignorante seguirá presente. Con esto quiero explicar que la persona que quiera y tenga interés por aprender realizara un buen uso de estos dispositivos explotando al máximo sus capacidades, sin embargo, otros verán este momento de sacar los aparatos en clase como una oportunidad para poder ver su serie preferida o realizar cualquier otro tipo de actividad no relacionada con la materia.
El móvil es un elemento de gran ayuda para trabajar. El problema viene cuando lo utilizamos en exceso o hacemos un uso inadecuado. El sistema educativo de hoy en día no favorece a la dinámica de la clase. Este sistema a permitido que aquellos alumnos que no tengan ganas de atender puedan distraerse de otra manera. Antes como los aparatos electrónicos no estaban permitidos, había un porcentaje menor de los alumnos que se distraían con el móvil. Hoy en día es demasiado tarde para evitar este tipo de problemas, porque en la mayoría de los colegios es necesaria la tecnología en clase.
Diré que, hoy día, no hay ninguna estadística que demuestra que con el uso de las «nuevas» tecnologías se haya mejorado el «rendimiento» esclar… ¡NInguna!.. Quien lo desee puede solicitar los datos de los rendimientos escolares en este Colegio en los últimos treinta años… Por tanto, es una falacia (mentira) afirmar lo contrario. Más aún, según las citadas fuentes, han empeorado… Comparto en que su uso hace las cosas más rápidas pero no más importantes en el aprendizaje… En conclusión: sois más ignorantes (con las nuevas tecnologías) que vuestros padres y madres con el lápiz , el cuaderno y el libro de texto… ¡Demostrad lo contrario!
Éste problema puede llegar a venir de unos pocos años atrás, ya que las nuevas tecnologías son cada vez más utilizadas en los colegios. La mayoría de los colegios de nuestro país han tomado la decisión de utilizar el ordenador en vez de los libros. Por ello hoy en día es muy complicado evitar que los alumnos no utilicen las nuevas tecnologías en clase de forma incorrecta ya que pueden usar el ordenador o tablet sin tener que usar el teléfono móvil.
En mi opinión, como dice el texto, el principal problema es la forma de dar la clase ya que los alumnos usamos los dispositivos de manera que así la clase se pueda hacer mas amena. Y se usa los dispositivos porque no hay otro método de des aburrimiento en clase, no se puede hablar, no se puede comer… Por otro lado, creo que la clase no es un sitio para pasárselo bien, por lo tanto, el profesor tendrá que buscar una manera de impartir sus clases entreteniendo a los alumnos y de manera que la solución sería, clases en las que todo el mundo pudiese participar y así no desviaríamos la atención o clases por grupos o juegos, para poder estar compartiendo opiniones de clase con nuestros compañeros. De esta manera, lo que el profesor conseguiría sería tener a todos sus alumnos «enganchados» a sus clases y sin la necesidad de utilizar los aparatos electrónicos para des aburrirse. Eso sería una opción. Pero en caso de que no funcionase, siempre quedará el método de antes de entrar a clase todos los alumnos deberán dejar sus dispositivos en un una caja que el profesor guardará. Pero creo, que si el objetivo del profesor es que sus alumnos le escuchen, que sepa, que por quitarle los dispositivos no lo va a a conseguir, ya que como antes he explicado, el objetivo esta en la forma de dar la clase.
Amiga Ane: ¿tengo yo pinta de titiritero?… Un profesor lo que debe hacer es «impartir» clase y no «entretener» a sus alumnos. Para «pasalo» bien tenéis otros espacios. El «aprender» no siempre es «divertido»; más aún, tiene momentos de «aburrimiento» por la sencilla razón de que requiere «trabajo»…
La gran influencia de los aparatos electrónicos es algo inevitable a día de hoy. Aunque una solución podría ser la prohibición de uso, resultan tan necesarios a día de hoy en todos los ámbitos de nuestras vidas que en los colegios se intenté promover su buen uso me parece algo fundamental. Aún siendo cierto que los niños y adolescentes nos vemos seducidos a darles un uso no educativo en clase, lo más práctico sería ofrecérsenos dispositivos que no contasen con ninguna de estas aplicaciones, para centrarnos en la educación en el colegio y preocuparnos del ocio fuera de él, aunque en muchas ocasiones, no consigamos lograrlo.
En mi opinión y como adolescente es indudable la gran influencia que los dispositivos electrónicos tienen en el habito de estudio, pero también es algo inevitable debido a la situación actual. Ya que hoy en día, la tecnología es necesaria para muchas actividades en el ámbito escolar: como buscar información para un trabajo, para consultar los apuntes…Hasta me atrevería a decir que hay clases que en la actualidad no se podrían impartir si alguno de estos aparato electrónicos fallase , aunque antiguamente no fuese así. Esto pasa porque tenemos tal dependencia de estos aparatos que muchas veces somos incapaces de pensar una solución que no los incluya. Teniendo en cuenta esta reflexión, no creo que debamos eliminar las nuevas tecnologías del entorno escolar. Sino que se debería fomentar el buen uso de estas ofreciendo dispositivos que limiten su uso al ámbito escolar y que no contengan ninguna aplicación de entretenimiento o que pueda ser una distracción. Por otro lado, también se podrían impartir charlas sobre un uso adecuado de estas y los beneficios que puede llegar a tener.
En muchas ocasiones el uso de los teléfonos o de aparatos electrónicos en clase es perjudicial para el alumnado por culpa de la dependencia hacia el teléfono que sufrimos. Pero creo que si se ponen reglas y se controla su uso puede servir para, trabajos, buscar datos… A parte de esto, la importancia en la enseñanza con los aparatos electrónicos hace que muchas veces cuando el wifi o la electricidad falla la clase no se desarrolle tan bien porque muchos profesores utilizan las nuevas tecnologías para enseñar.
En mi opinion, la mejor opcion para que los dispositivos electrónicos se utilicen de una buena manera seria utilizar en el horario escolar un ordenador o Tablet que solo se utilice para cosas de clase sin ninguna aplicación o distracción en nuestro estudio.
Hoy en día, la mayor parte de los colegios está sustituyendo los libros tradicionales por libros digitales, y para el uso de estos es necesario una táblet o un ordenador. Los objetivos de este cambio son hacer las clases más interactivas y dinámicas además de aligerar el peso de la mochila que tienen que cargar a diario que para un niño de primaria, por ejemplo, puede ser excesivo para su espalda. Estos dispositivos son una tentación para jugar en clase y así evadirse de una explicación que el alumno crea aburrida. Los alumnos de cursos inferiores (primaria, 1º y 2º de la ESO) dado su corta edad aún no son conscientes de lo que conllevaría no escuchar al profesor, en cambio, en los cursos superiores los alumnos son lo suficientemente mayores como para decidir si escuchan al profesor o no y acarrear con las consecuencias.
En mi opinión, el uso de aparatos electrónicos en clase no tiene ninguna ventaja pero si muchas desventajas. El uso de estos dispositivos solo ayuda a disminuir nuestro rendimiento escolar ya que si estamos en una clase que se nos esta haciendo aburrida tendemos a desconectar con la clase y conectarnos a las redes sociales. Situación que en una clase de Bachillerato puede ser un problema con motivo de la importancia de la nota. Este método de estudio personalmente me parece también malo cuando estamos en casa ya que creo que es más fácil estudiar mediante apuntes en físico que en ordenador porque en físico cada uno puede anotar sus duda, ejemplos…
Si que es verdad que los alumnos a día de hoy suelen utilizar sus móviles, Ipads, ordenadores etc. durante las clases. Este uso no siempre es apropiado, es decir, no siempre se utilizan por temas académicos, la mayoría de veces lo utilizan por aburrimiento o desconexión de las clases. Realmente es un problema, pero tampoco se puede hacer nada para evitarlo… yo creo que si el alumno/a decide atender al móvil antes que al profesor es problema suyo, luego ya verá las consecuencias a la hora de hacer el exámen.
Hoy en día la mayoría de colegios han sustituido los libros por aparatos electrónicos tales como las tablets, ordenadores o incluso teléfonos móviles , en mi opinión la razón de esta sustitución viene dada por la rápidez de búsqueda y la amplia información que se puede encontrar en estas plataformas. Es verdad que en el colegio con estos aparatos nos podemos dedicar a la búsqueda de cosas que no tienen nada que ver con la asignatura que estemos dando, pero no creo que sean los alumnos los que tienen el problema, creo que el colegio debería programar una serie de actividades anuales que fomentan el bueno uso de la tecnología, además de formar y prevenir a los alumnos de las consecuencias derivadas de su mal uso.
Cada vez más colegios implantan los dispositivos electrónicos en las clases como métodos educativos. Sin embargo, como dice el texto, se utilizan en varias ocasiones como métodos recreativos. Esta última tendencia provoca distracciones en los alumnos. Bajo mi punto de vista, en ningún caso se debería de suprimir el uso de aparatos electrónicos ya que aportan más ventajas que inconvenientes. La solución sería hacerles ver a los alumnos la importancia de atender durante las clases; ya que los únicos perjudicados serían ellos mismos.
En mi opinión el uso de los dispositivos electrónicos no tiene nada que ver con la manera de dar la clase del profesor, ya que yo he visto a gente utilizar el móvil aún cuando el profesor imparte bien su materia, de manera «divertida» haciendo que los alumnos estemos atentos. Por lo que, que un alumno utilice el móvil en clase es problema suyo y en múltiples ocasiones se verá reflejado en sus calificaciones.
Por otra parte, yo creo que es prácticamente imposible suprimir el uso de los dispositivos electrónicos en las aulas ya que hoy en día los utilizamos para trabajar gran parte de la materia y aumentan el ritmo de nuestro trabajo. También pueden aumentar la eficacia de nuestro trabajo ya que en Internet están las respuestas a todas las dudas que nos puedan surgir.
Afirma Andrea que «en Internet están las respuestas a todas las dudas que nos pueden surgir»… Aunque sea mucho decir lo de «todas» me surge una profunda pregunta: ¿Sabes quién te da la respuesta?… ¿Sustituye un anónimo o desconocido a cualquier persona que conoces a la hora de preguntar algo?… ¿sabes si hay algún interés oculto en la respuesta?… ¿No es más positivo emplear un tiempo en hablar, preguntar, consultar… con quien tienes confianza?…
En mi opinión, este texto tiene toda la razón se usan en las hora lectivas ordenadores, móviles, tablets… para entretenerse y no hacer caso en las clases. Los jóvenes ponemos la excusa de que los usamos para buscar información y resolver dudas, nos facilita el trabajo a la hora de realizar la tarea, y puede ser que bien usados sea que sí, pero si no estás concentrado solo te perjudica. Pienso que una solución a este problema sería el utilizar libros, aunque, un estudiante desmotivado siempre busca una distracción, antes también habría chavales que se distrajeran y no prestaran atención, además acabarían molestando al resto de compañeros, ahora sin embargo el que utiliza el dispositivo es el único afectado.
Por una parte la implementación de los dispositivos electrónicos tiene un lado bueno el cual sale a relucir mediante un uso responsable y adecuado de las nuevas tecnologías, es decir utilizándolas de manera que nos sirvan para el estudio sin ningún tipo de distracción. Pero por otra parte, gran cantidad de alumnos, los usan de manera que en vez de usarlos de manera lectiva, lo usan como método de distracción para que las clases se les hagan mas amenas y se les pasen mas rápido. Es decir, que el uso de los dispositivos en el aula tendrían que estar implementados, pero con una serie de limitaciones para evitar la distracción del alumnado.
Hoy en día cada vez es mas común ver a alumnos llevando a clase ordenadores, tablets, móviles… como substituto a los libros tradicionales. Asimismo, llevando estos aparatos reducimos considerablemente el peso que diariamente llevamos en nuestras espadas y a la vez evitamos los dolores de espalda.
En mi opinión, los ordenadores pueden ser una buena herramienta para poder reforzar algunas asignaturas con la información que nos proporciona Internet y para hacer las clases más interactivas y dinámicas, pero también puede hacer lo contrario. Normalmente, resulta muy complicado no sucumbir a la tentación de utilizar esas tecnologías para jugar y desconectar de la clase. Esto hace que no prestemos atención a las explicaciones del profesor y resulten mucho más complicados los exámenes. Además, en cursos más complicados como es el caso de 1º y 2º Bachiller no nos podemos permitir perder esa información, ya que no disponemos de tiempo ilimitado para poder preparar esos exámenes.
Por lo tanto aunque las nuevas tecnologías ayuden mucho a la hora de estudiar y hagan que nuestras mochilas sean más ligeras, a mi me parecen mucho más eficaces los libros tradicionales, puesto que no te crean esa tentación a navegar por Internet y jugar mientras estas en clase.
Estoy de acuerdo con el texto leído y con lo comentado por mis compañeros con anterioridad. Hoy en día se puede hacer utilidad buena o mala de los aparatos electrónicos, el uso que le hagamos nosotros esta en nuestras manos. Últimamente, se ve mas el nuevo método el cual esta implantando en muchos colegios para acabar con los libros y usar mas la tecnología. En mi opinión, esto puede conllevar a grandes distracciones en el ámbito de estudio, ya sea por cualquier conversación o videojuego que se utilice por el aburrimiento que pueden causar algunas asignaturas. También tengo que decir que gracias a estas tecnologías obtenemos la información que necesitamos en un momento y es muy partico a la hora de hacer cualquier tipo de trabajo. Por tanto, creo que esta en nuestras manos darle un buen uso o no.
Cada vez es mas común y accesible para los alumnos hacer uso de diferentes dispositivos electrónicos en las aulas, ya sea para trabajar, estudiar como para hacer deberes. Esto, tal y como es sencillo de ver aporta una gran serie de ventajas tanto para alumnos como para profesores, ya que hace las clases mas interactivas y, por ende, mas dinámicas. El problema reside en el uso que los alumnos deciden dar a estos dispositivos, ya que usados correctamente otorgan una gran variedad de mejoras y beneficios, tal y como he mencionado previamente. En cambio, estas tecnologías pueden darnos a los estudiantes la tentación de desconectar de una clase, ya sea porque estas cansado o porque te está resultando excesivamente aburrida, y realizar cualquier otra cosa mas entretenida en clase. Estas distintas actividades pueden ir desde el revisar las redes sociales, hablar con la gente, jugar a algo, etc. Esto claramente es un gran problema ya que no solo la persona no está aprovechando el tiempo sino que además al no entender la materia dado que no ha atendido, puede retrasar el ritmo de la clase si después se pone a preguntar. Y esto, además, en cursos tan importantes como son los de Bachiller puede ser un gran inconveniente.
Por ello, en mi opinión el uso de estos dispositivos no debería verse reducido, sino que su uso debería ser controlado, para así evitar tales comportamientos.
Coincido en que en muchas de las clases el uso de los nuevos dispositivos tecnológicos puede distraer a los alumnos de la clase. Debido a esto se han tomado medidas como la implementación de un «firewall» que bloquee la mayoría de páginas web existentes o la prohibición de los teléfonos móviles. Sin embargo, algunos alumnos encuentran complicadas maneras de evadir estos bloqueos, lo que me lleva a preguntarme, ¿por qué esforzarse tanto en evitar estas medidas para poder utilizar estos dispositivos sin restricciones?
Para empezar, se debe a la irresponsabilidad de algunos alumnos. Siempre ha habido alumnos «pasotas» que les da igual el colegio y están ahí por obligación. Los padres deberían educar o corregir a esos niños por su propio bien, pero de nada servirá si no hay un mínimo de interés por parte del niño.
Aún así, creo firmemente que la cusa de la distracción de muchos alumnos es el método de enseñanza de ciertos profesores. Con esto no estoy queriendo decir que los profesores deban hacer clases «divertidas» para los alumnos, pero si deben de tener un método de enseñanza que incentive la curiosidad y las ganas de aprender del alumno. Por experiencia se que el profesor influye mucho en la actitud de la clase, y que hay ciertos profesores decididos a incentivar el interés de la clase hacia la asignatura, con positivos resultados.
Realmente es un tema difícil de solucionar, y quizás la raíz del problema esté en el sistema educativo español. Países como Finlandia optaron por un sistema educativo más moderno en el cual los alumnos están mas involucrados en la clase, se encuentran mas cómodos y salen más preparados que la media europea. Quizás es hora de una reforma.
La percepción de las clases ha cambiado mucho para los alumnos, porque creen que si la clase no es didáctica es normal que se desconcentren. Si es verdad y puede influir, pero no es excusa para que se pongan con el ordenador a jugar o a chatear entre ellos y menos en una clase a la que se acude para aprender tanto valores como conocimientos técnicos y no a pasar el rato ni echarse unas risas. A una clase se va a aprender y no a «estar de camping» y quien piense lo contrario esta muy equivocado.
No se puede negar que los aparatos electrónicos cuando se usan bien son una gran ayuda, pero ese el problema, que muchas veces no se usan como se deben usar. Como dice el autor del texto muchos alumnos usan los ordenadores, tablets o teléfonos móviles en clase para ver vídeos o para jugar a juegos. Entonces las horas que se pasan en clase realmente son inútiles porque estás haciendo algo que no tiene nada que ver con la materia, además si estás durante la hora de clase jugando con el ordenador tienes que hacer en tu casa lo que tus compañeros han hecho en clase. Por eso, yo creo que os colegios deberían ser más estrictos con las normas respecto al uso de apaatos electrónicos en clase.
Si bien es verdad que cada vez los estudiantes sentimos una mayor necesidad de recurrir a las nuevas tecnologías para llevar a cabo trabajos escolares, de investigación y demás, como bien dice el texto, estas también suponen una gran distracción. Es posible que nuestro comportamiento en las clases y, con ello, nuestro interés deje mucho que desear, pero ¿acaso ayuda el sistema educativo en el que convivimos y hemos crecido a mejorar esta situación? Pasamos alrededor de siete horas seguidas sentados en un pupitre, pretendiendo atender a lo que cada profesor dice y recomienda, para después llegar a casa y memorizar teoría palabra por palabra con el único objetivo de escribirlo en un examen y olvidarlo poco después. Por si esto fuera poco, tenemos que escuchar cómo se nos dice que la nota es algo secundario, un simple número, cuando el sistema educativo nos ha enseñado que cada uno es una nota y esa nota será la que tenga la llave de nuestro futuro. Puede que los jóvenes de hoy en día nos distraigamos con las nuevas tecnologías y estudiemos por obligación y no por gusto, pero, ¿es posible estudiar por gusto visto lo visto?
En general, el texto tiene bastante razón, ya que hay muchos alumnos que pasan los momentos aburridos de las clases mirando el teléfono o hablando con sus amigos. Pero, estos alumnos al igual que pueden estar mirando el móvil, podrían estar dibujando o haciendo cualquier otra cosa menos atender. El problema no está creo yo, en el uso de las nuevas tecnologías , sino en el uso que le da cada uno. Utilizar un portátil o tablet puede ayudar al alumnado de muchas maneras ya que las dudas o problemas que puede tener en una asignatura se acaban con dos clicks. Por otro lado, el alumnado que hoy juega con el móvil es el que no muestra interés por atender, ni ahora ni hace veinte años sin móviles. Así que, no deberíamos prestar atención a aquellos que no quieren aprender y fomentar el buen uso de las tecnologías entre los alumnos que están dispuestos a seguir las explicaciones del profesor.
El segundo texto habla de la presencia de aparatos moviles en todos los momentos de la vida. El peligro es enorme por la incapacidad de concentrarte en lo que estas haciendo si no haces mas que entrar a ver mensajes etc..
Y si ademas lo haces en la escuela donde uno tiene que estar concentrado y atento al profesor y su explicacion pues si que el resultado puede ser nefasto. Lo cierto es que la atraccion de distraerse con esos aparatos es tan fuerte que para evitarlos muchos los han prohibido en las horas de clase.
Pues realmente el texto tiene razón, yo cuando he usado el móvil en clase por ejemplo si que he aprovechado y he revisado mis redes sociales aunque por otra parte eso lo he hecho siempre y cuando había terminado mi trabajo.
Puede que el uso de los dispositivos electrónicos sean un obstáculo a la hora de dar clase ya que pueden ser molestos y ruidosos pero hoy en día son tambien imprescindibles para poder hacer trabajos.
En el caso de nuestro colegio, los móviles están prohibidos y en este aspecto no estoy de acuerdo ya que la causa de que estén prohibidos es que algún graciosillo ha ejercido mal el uso de las redes sociales y por ello todos los alumnos tenemos que pagar su acto
No quiero poner en duda el hecho de que los dispositivos electrónicos sean un arma de doble filo en las aulas, pero me gustaría enfocar de modo más general la cuestión de las distracciones en clase. ¿No es acaso preocupante el hecho de que el único recurso para mantener la atención de los alumnos sobre la materia sea la simple imposibilidad de estos de fijarla en nada más? Muchos jóvenes y adultos realizan actividades deportivas, cursos, extraescolares… de manera completamente voluntaria, y esforzándose al máximo. ¿Cómo es que no somos capaces de imbuir este espíritu de sacrificio en los menores, y nos vemos obligados a recurrir al aislamiento sensorial y psicológico? ¿A qué clase de fantasma atribuimos las elevadas tasas de trastornos psiquiátricos crónicos en las nuevas generaciones? Hoy en día, la educación lo es todo, y mientras algunos individuos conseguirán dar de sí lo que la sociedad les exige a gritos, otros se doblarán y romperán bajo el estrés. Para muchos alumnos y alumnas, la educación habrá sido un trauma psicológico que les costará remediar. «Son los mayores de 16 años con fracaso escolar quienes consumen estupefacientes de manera más o menos habitual». ¿Qué raro, no?
Como bien dice el texto los dispositivos electrónicos se usan principalmente para mandar o recibir mensajes o para navegar en la red . En mi opinión la culpa de que los alumnos estén distraídos no es solo de ellos. Los profesores también influyen en ello, ya que cuanto más claras sean las explicaciones y más dinámicas sean las clases, habrá mayor interés por parte de los alumnos. Así no tendrán tanta tendencia a mirar sus dispositivos electrónicos .