TEMA 5: Los espacios agrí­cola-ganaderos y forestales de la España húmeda

Los factores que condicionan los paisajes agrarios son: el re­lieve, el clima, los suelos, la propiedad y las decisiones polí­ti­cas y económicas. De todos ellos, el clima es el factor más im­portante a la hora de definir un espacio agrario, ganadero o forestal. El balance de humedad, el régimen térmico y el vo­lumen de calor acumulado permiten diferenciar en España tres grandes ambientes agroecológicos de carácter bioclimático:

El ámbito de los paisajes agrarios atlántico-húmedos, con balance de humedad positivo que es el objeto de nuestro trabajo.

El ámbito mediterráneo seco con habitual déficit de hume­dad anual con una marcada y larga sequí­a estival.

El ámbito semiárido de degradación mediterránea en la Pe­ní­nsula y de carácter subtropical en Canarias con serias li­mitaciones para la agricultura de secano.

 Los espacios agrí­cola-ganaderos y forestales de la España húmeda

1.- Localización. Comprende un 20% del territorio español. Su extensión abarca todo el norte peninsular, así­ como algunas montañas interiores húmedas: los sistemas montañosos Cen­tral e Ibérico.

2.- Factores naturales. El relieve es montañoso y el clima oceá­nico con abundantes precipitaciones y temperaturas suaves ofrece las condiciones idóneas para el crecimiento de bosques y prados principalmente (un 70% de la superficie).

3.- Estructura agraria. Tiene los siguientes rasgos:

  1. La propiedad es de tamaño pequeño, de tipo familiar y en las montañas hay tierras comunales dedicadas fundamen­talmente a pastos. En Galicia predominan los minifundios y en Asturias, Cantabria y Paí­s Vasco las explotaciones se han modernizado pero no han conseguido aún una gran renta­bilidad. Además es muy común la agricultura a tiempo par­cial. En el Paí­s Vasco, en Bizkaia y Gipuzkoa la SAU (Superficie Agraria Utilizada) es infe­rior a 5 ha y su uso es ganadero y forestal.
  2. La población agraria ha descendido en los últimos 50 años y se ha producido un gran envejecimiento. También ha des­cendido el número de explotaciones. Destaca el papel ejer­cido por la mujer que ha tomado el control de las explota­ciones agrarias mientras que sus maridos trabajaban en la mar o en la industria. El poblamiento es disperso en Bizkaia y Gipuzkoa mientras que en el resto de este amplio territo­rio la población se distribuye en pequeñas aldeas.

4.- Usos del suelo y productos agrarios. Los usos del suelo son fundamentalmente ganaderos:

  1. La agricultura es de secano debido a la regularidad de las precipitaciones y ocupa una escasa superficie. En la costa los campos se localizan en el fondo de los valles para aten­der a la demanda urbana, y en el interior el aprovechamiento agrí­cola es más escaso. Hay un policultivo a base de pro­ductos de huerta, verduras y legumbres; y forrajes, remola­cha y maí­z para complementar la crí­a del ganado; manzana para elaborar sidra y uva para la elaboración de vinos con Denominación de Origen como el Albariño, Ribeiro y Txakoli.
  2. La ganaderí­a es la actividad agraria más importante y se ve favorecida por la abundancia de prados, y la demanda ur­bana de leche y carne. Aquí­ se concentra 1/3 de la produc­ción estatal de leche. Actualmente, su producción ha dis­minuido por la normativa europea y el Estado ha de importada de los paí­ses europeos excedentarios (Francia). Predomina el ganado bovino para la producción de carne o de leche. Se crí­a en régimen extensivo o semiextensivo y se orienta a la producción de terneros. El ganado se crí­a en ré­gimen intensivo para la producción de leche y derivados.
  3. La propiedad. En Galicia predomina la pequeña y mediana explotación familiar y en el resto de la fachada atlántica las explotaciones se han modernizado en tamaño y equipa­miento. También está extendida la ganaderí­a a tiempo par­cial. Para superar las dificultades del sector se han formado cooperativas para tratar la leche y comercializarla: Agro-cantabria, Cooperativa de Agricultores de Gijón, Kaiku y cooperativas para elaborar piensos. El ganado ovino se crí­a de forma extensiva y es tradicional hacer una trashumancia corta, en invierno en los valles y en verano en los montes (del Gorbea a Larrabetzu o desde Urbia al Goierri).
  4. El sector forestal. Es otra actividad importante. En el Paí­s Vasco abunda la repoblación de pino insignis que se da en las propiedades privadas. En Galicia y Asturias la repoblación de eucalipto, que se utiliza fundamentalmente para obtener papel. Además, quedan algunos bosques de frondosas de propiedad comunal.

5.- Caracteres especí­ficos de este paisaje agrario:

  1. Galicia tiene una elevada proporción de población ac­tiva dedicada al sector agrario, en torno al 30%. Es una agri­cultura de baja productividad, con predomino de la pe­queña explotación. Se puede subdividir en dos grandes áreas:
  • El litoral, donde se ha producido un incremento del ren­dimiento agrario por la introducción de avances técnicos agrí­colas y ganaderos, asociados al retroceso del viñedo, al empleo de abonos quí­micos y a la mejora de las razas ganaderas vacuna y porcina.
  • El interior. Aquí­ se emplean técnicas tradicionales que complementan el aprovechamiento agrario del monte. Es caracterí­stico un policultivo orientado hacia el autoconsumo de productos como maí­z, judí­as y frutales, en las áreas bajas, y de centeno y patata en las altas. La gana­derí­a es autóctona, la raza rubia gallega (en el vacuno) y la carballina (en el porcino).
  1. El paisaje astur-cántabro. Se localiza en las Comunidades Autónomas de Asturias y Cantabria y es una agricultura fun­damentalmente a tiempo parcial donde hay una gran com­petencia por el uso del suelo entre los espacios industria­les y residenciales frente a la actividad agrí­cola y ganadera. El suelo está dedicado en su mayor parte a la actividad ga­nadera frente a la agrí­cola. La ganaderí­a vacuna está orien­tada a la producción lechera con una importante cabaña ga­nadera de razas de origen foráneo, como la raza parda alpina y la La introducción de avances técnicos ha ido en detrimento de la trashumancia tradicional. La crisis ganadera como consecuencia de los cupos lecheros, tras la entrada en la UE (Unión Europea), ha favorecido la creación de cooperativas ganaderas.
  2. El Paí­s Vasco. Tiene una escasa población activa agraria, en torno al 1,9 %, con un predominio de la actividad ganadera, excepto en ílava. La vivienda tradicional es el case­rí­o, que articula la explotación ganadera de vacuno y se complementa con cultivos orientados a la producción de fo­rrajes, prados y explotación de los montes.

El presente Tema está tomado de «Geografí­a» (EREIN). Marga Garizurieta, Carmen Sola y Mª Dolores Barinagarrementerí­a

 

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2 Respuestas

  1. Mario dice:

    El sector agrícola, ganadero y forestal se ve modificado debido a varios factores como el desarrollo de los países, decisiones políticas, al cambio climático. Debido a esto, tienen que adaptarse a las nuevas situaciones, uniéndose y colaborando en cooperativas, replantando árboles y productos más adecuados. Hay que actualizarse con los cambios y las necesidades.

  2. Elvira Iglesias dice:

    Es sorprendente la variedad de la que dispone el territorio español y eso que solo estamos hablando de la España húmeda (un 20% del territorio).

    Aun que la superficie utilizada para la agricultura o ganadería se haya ido reduciendo progresivamente y sus trabajadores hayan ido envejeciendo producimos frutos de huerta, verdura, legumbres, forrajes, remola­chas, judías, maíz, manzana (para la sidra) y etc. En el ámbito ganadero también se produce mayoritariamente leche y carne y en el forestal; papel.

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