La sequía deja al descubierto ‘muelles’ del Imperio Romano en el fondo del Rin
El Antiguo Imperio Romano ha dejado huellas en muchas partes de Europa. En las cercanías de Bonn, en el río Rin, han quedado al descubierto unos muelles del Imperio Romano, por el bajo nivel de las aguas. Los romanos habrían establecido estos muelles como los que, se supone, se extendieron entre Königswinter y Bad Honnef, muy cerca de Bonn, según DW.
Los muelles que han quedado visibles son formaciones rocosas que siguen líneas casi perfectas río adentro, y cuyos restos quedaron sumergidos en el fondo del Rin con el paso de los años. La sequía que está azotando a prácticamente toda Europa, ha dejado estos muelles al descubierto. Las aguas de Rin se han replegado y provoca que estas líneas rocosas convivan con ojos de agua que han quedado ante la bajada del nivel del Rin.
Este fenómeno lo van a aprovechar muchos historiadores, que analizarán estos restos antes de que las aguas del Rin vuelvan a tragárselo. Según DW, un estudio de 2019 concluyó que los muelles romanos en la cercanía de Bonn son obra del ser humano. El tema había provocado un gran debate en el mundo científico, y se espera que la sequía de 2022 sea la llave que cierre definitivamente la puerta a esta discusión.
Algunas de las rocas tienen unos grabados con fechas e inscripciones de las sequías más graves
La sequía ha dejado al descubierto, a parte de los muelles, unas piedras con mucha historia. En concreto, se trata de las «piedras del hambre», que tienen grabadas fechas e inscripciones de las sequías más graves. Algunas contienen mensajes tan inquietantes como: «Si me ves llora» o «Quien me vio, lloró. El que me vea, llorará«. El bajo nivel de las aguas, antiguamente, provocaba malas cosechas, escasez de alimentos, aumento de precios y hambruna, con consecuencias fatales para la población.
Tomado de www.abc.es