Los embriones son niños: una sentencia sacude la fecundación ‘in vitro’ en Estados Unidos
Al menos tres de las principales clínicas que proporcionan procesos de fecundación in vitro en Alabama para personas con problemas de fertilidad han anunciado la suspensión de sus servicios tras la sentencia del Tribunal Supremo de este estado de EE.UU. hace unos días.
El alto tribunal estatal determinó que los embriones se deben tratar como personas en la aplicación de una ley de finales del siglo XIX sobre homicidio negligente de menores. Tres parejas demandaron a una clínica de Mobile, una ciudad en el sur de Alabama, después de que un operario del centro destruyera embriones congelados por accidente, por lo que exigían una compensación económica por tratarse de menores.
Dos tribunales inferiores no aceptaron esa versión. Determinaron que los embriones no eran humanos. Pero el Supremo de Alabama, un estado de fuerte carácter conservador, determinó que sí son menores en la definición que establece esa ley sobre homicidio negligente. La decisión tuvo el respaldo de siete de los nueve jueces del tribunal.
La sentencia será recurrida ante un tribunal de apelación estatal, pero, de momento, ha provocado conmoción a nivel nacional sobre la posibilidad de que esta interpretación se extienda a otros estados y sobre qué consecuencias puede tener en la industria de la fecundación in vitro, de la que dependen muchas personas para tener hijos.
Indemnizaciones económicas
El miércoles, poco después de que se conociera la sentencia, el hospital de la Universidad de Alabama en Birmingham, anunció que paraba los tratamientos. «Estamos entristecidos por el impacto en los intentos de nuestros pacientes por tener hijos a través de fecundación in vitro», explicó el centro en un comunicado. «Pero debemos evaluar la posibilidad de que nuestros pacientes y médicos sean perseguidos de manera penal o se enfrenten a indemnizaciones económicas por seguir los estándares de estos tratamientos».
El hospital detalló que seguiría con procesos para extracción y congelación de óvulos de mujeres, pero no con la práctica de fertilizarlos y desarrollar embriones.
Un día después, otra clínica, Alabama Fertility, tomó la misma decisión. «Estamos trabajando mucho para alertar a nuestros legisladores sobre el amplio impacto negativo de esta decisión en las mujeres de Alabama», dijo en un comunicado. Y, según la agencia Reuters, otro centro más (Center for Reproductive Medicine at Mobile Infirmary) habría suspendido también los tratamientos de fecundación ‘in vitro’.
Limitar la congelación de embriones
La sentencia es muy limitada y trata solo de esos embriones congelados destruidos por accidente. Pero si la congelación de embriones -muchos de los cuales acaban no siendo utilizados porque otros son viables y exitosos en la fertilización de una paciente- acaba siendo una práctica perseguida, cambiaría de forma radical los estándares de la fecundación in vitro.
Eso es algo que la sentencia no establece, pero el magistrado que preside el Supremo de Alabama, Tom Parker, dejó escrita en su opinión sobre la sentencia que el poder legislativo estatal debería examinar el asunto e impulsar regulaciones que determinen cómo limitar el uso de embriones. Citaba a países como Italia, Nueva Zelanda o Australia, donde se establece y limita el número de embriones que se pueden desarrollar e implantar en las mujeres.
Vida desde la concepción
La decisión judicial de Alabama supone la primera vez en la que se establece que la vida comienza desde la concepción, aunque sea fuera del útero. Ocurre casi dos años después de una sentencia decisiva del Tribunal Supremo de EE.UU. sobre aborto -tumbó las protecciones federales a la práctica y abrió la puerta a prohibiciones o limitaciones estrictas en los estados- y dentro de esfuerzos de la comunidad pro-vida para que se dé personalidad jurídica plena al feto.
Aquella sentencia tuvo impacto político en las elecciones legislativas de 2022, con una activación del voto femenino como respuesta, y la campaña de Joe Biden, que va por detrás de su probable rival, Donald Trump, en las encuestas, busca hacer del aborto un asunto central en las presidenciales del próximo noviembre. Los demócratas han dejado claro que utilizarán la sentencia de Alabama y su impacto en la fecundación in vitro como una nueva fuente de ataque contra los republicanos.
Biden cree que la sentencia de Alabama daña «a las familias que intentan desesperadamente quedarse embarazadas», y que mostraba un desprecio «escandaloso e inaceptable» por la elección personal.
Tomado de www.abc.es