DEBATE 143: El censo de perros en Asturias se dispara (2º de la 3ª Evaluación)
En la peluquería Mi Guau Beatriz García les da un baño de ozono, burbujas e hidromasaje; si el can anda estresado le aplica aromaterapia, reiki y flores de Bach. «Ahora ya hay camareros que lo mismo que te ponen un pincho a ti le dan una galleta al perro», agradece Agustín Ronda, de Fauna Urbana. Tras las habituales chaquetas y gorros, el último grito son los collares con luces que transforman al animal en una suerte de discoteca andante para que el dueño no lo pierda de vista en la noche. La revolución de las mascotas tardó, pero su fuerza en Asturias admite pocas comparaciones. Durante la última década el censo de perros viene incrementándose a un ritmo sostenido de 10.000 al año. En 2017 ese ritmo provocó un ‘sorpasso’ histórico: hay ya más canes en la región que bebés, niños y adolescentes. Y la diferencia sigue creciendo.
En el Registro de Identificación de Animales del Principado (Riapa) hay constancia de 163.627 perros, aunque «la realidad es mayor», matiza Armando Solís, decano del Colegio de Veterinarios, el organismo que vela por ese censo. «Existe la obligación de registrar al perro, pero sabemos que hay muchos sin dar de alta. Ciertos estudios apuntan a que en las ciudades se cumple más la norma, pero no estamos seguros», comenta.
En lo tocante a personas, el último recuento del Instituto Nacional de Estadística (INE) cifra en 150.674 los asturianos que aún no han cumplido los 20 años. Los perros ‘ganan’ con más de 13.000 efectivos y no por casualidad. Dueños, veterinarios y sociólogos coinciden en que uno de los factores que alimentan este ‘boom’ es, precisamente, la sangría demográfica. Tanto en la vertiente de una menor natalidad como en el incremento de los hogares con adultos y mayores viviendo solos. «Es una tendencia que observas en toda la Europa desarrollada, las sociedades con pocos hijos sustituyen esa figura por los animales», expone Solís. «A la gente que vive sola el animal le acompaña, le comprende, le hace hablar, le obliga a salir de casa y relacionarse con otros dueños; sus efectos terapéuticos están bien definidos. No conozco a nadie que pruebe y lo deje», abunda.
Tomado de www.abc.es
Hoy en día cada vez es más frecuente encontrarse con personas cuyas vidas giran en torno al cuidado de mascotas. Los animales de compañía ya no son mascotas, sino que son un miembro más de la familia. En algunos casos son los sustitutos perfectos de los hijos, pero deberían de ser “amores” diferentes. Si se tiene una mascota es con todas las consecuencias y por supuesto se les educa con responsabilidad. Hay que preocuparse por ellos pero no humanizarles. Se gastan muchísimo dinero en ropa, en su salud, en llevarles a hoteles en vacaciones… Para mí una mascota es un animal de compañía al que se le tiene en las mejores condiciones y por supuesto se le quiere, pero de ahí a darle cualidades como a un ser humano… hay diferencia. Todo esto le está viniendo bien a la industria veterinaria y a las empresas de alimentación de animales de compañía.
En nuestra sociedad cada vez sentimos más la necesidad de soledad. A veces el cariño y la compañía que nos deben dar las personas como familiares, amigos, vecinos la suplimos con el cariño y compañía que nos da un perro.
A mi parecer el auge de mascotas que vivimos en nuestro entorno es beneficioso, pero con un límite. Los perros son animales y no se puede comparar su compañía con la que puede y debe dar una persona a sus familiares. Por otra parte, me parece exagerado que a un perro no solo se le tenga que alimentar y llevar al veterinario, lo cual es obligatorio, sino que se le tenga que comprar juguetes, dar aromaterapia, peluquería y centros de estética para perros. Es algo exagerado y fuera de lugar que lujos a los que no pueden llegar algunas personas que a veces tienen carencias hasta alimenticios, puedan llegar perros que son animales.
Las personas están por encima de los animales. Tenemos que cuidar y procurar un buen trato para los animales, pero primero tenemos que tener en cuenta a las personas. El cariño que damos a un perro igual suple al cariño que merece otra persona de nuestro entorno.
No es de extrañar que en la sociedad actual se tengan más animales de compañía, muchos de nuestros mayores están solos o simplemente se quiere tener una mascota de este tipo. A la hora de echar cuentas, un perro puede ser más económico que un hijo y mirando la parte más cruel, sino gusta su compañía se puede regalar o como hacen algunos desalmados, abandonarlos. Los animales no son como los humanos que expresan sus sentimientos, por lo tanto se tiende a su compañía. Asturias no es más que un reflejo de la sociedad actual.
Los animales, y en concreto los perros, hoy en día están muy presentes en nuestras vidas. Por ello, entiendo que al convivir con la familia, tengan atenciones y cuidados que antes no, pero como todo en la vida, ha de tener unos límites.
En cuanto al aumento en el censo de perros, habría que adoptar y no comprar a demanda, pues son muchos los que están abandonados en las perreras. Sí que estoy de acuerdo en que hay que querer a los animales, pero no hasta el punto de humanizarlos.
Pienso que el hecho de tener un perro si se es consciente de las responsabilidades que esto conlleva es algo positivo, ya que son muchos los estudios que demuestran que las mascotas influyen de manera positiva en la salud y en el bienestar humano y esta puede ser una de las razones por la cual cada vez más personas tienen perros y cada vez son más los que consideran a los perros como miembros de la familia e incluso como hijos, esto genera nuevas necesidades de consumo de productos y servicios lo que supone un negocio para perros en expansión que genera grandes beneficios.
Por otra parte esta tendencia a humanizar a los perros considero que no es positiva porque los dueños tratan de cambiar en sus perros conductas caninas por conductas humanas y esto hace que los perros no solo no sean felices sino que tengan hasta problemas de conducta.
Por último, no creo que la última frase del texto sea adecuada, hay muchos casos en los que se abandonan perros u otros animales, ya sea por problemas económicos, por mero aburrimiento, o porque la mascota no a cumplido las expectativas.
Es cierto que hoy en dia se ven mas perros por la calle que niños pequeños, y esto creo que podria ser por como esta la sociedad actualmente construida. La tecnologia ha estado avanzando a pasos gigantados, haciendo que llegemos a pasar mas tiempo pegados a una pantalla que encargarnos de plantarle cara a cara a la vida real, y como las futuras generaciones cada vez son mas perezosos y quieren que les den todo hecho (yo entre ellos), les resulta mas facil llenar el vacio de la soledad o maternidad y paternidad con unas mascotas que con los hijos, ya que resultan mas economicos y no hay que estar tanto tiempo atentos .
Los animales y sobre todo las mascotas a día de hoy son muy especiales para gran parte de los seres humanos. Hacen compañía y dan mucho cariño y por eso quizá tantas familias españolas tengan mascotas. Lo que no me gusta es que a los animales se les trate como si fueran personas, no tienen porque pasar por ciertas cosas. Hay personas que llevan a sus perros a competiciones… a ver quien tiene el mejor pelo, el mejor estilismo… Me parece un locura. Los animales no son objetos que nosotros podamos utilizar a nuestro antojo, ¡son seres vivos!
Hoy en día los animales de compañía que las familias en el pasado solían tener para pasar un buen rato hoy han pasado a ser una parte fundamental de la familia llegando en muchos casos a ser un miembro mas de la familia. Esto viene dado ya que los animales dan bastante cariño y amor a sus propietarios, pero muchas veces los propietarios llegan a situaciones limites con las mascotas pensando que son un humano mas y les hacen pasar por situaciones que a mi parecer no son nada normales, como las competiciones para saber que perro es el que mejor camina o el que mejor peinado tiene…. Aunque existan personas que utilizan a los animales domésticos para ganar dinero la mayoría busca tener una mascota para tapar o camuflar aspectos de su vida que no pueden conseguir como la maternidad/paternidad, la muerte de un ser querido… buscando en ellos el afecto que necesitan.
Parece que hoy en día la gente no se ve en la necesidad de tener hijos para sentirse plenamente realizados en la vida, y es por eso que recurren a las mascotas. No me parece mal en absoluto siempre y cuando se cuiden con responsabilidad y se tenga la capacidad económica de mantenerlos.
Sin embargo, me resulta alarmante que la cantidad de perros en Asturias haya superado a la de jóvenes, ya que estos deberían ser la base social y económica del futuro, y debido a la crisis y las nuevas formas de vida se piensa dos veces antes de decidir dar el paso y tener un hijo.
No digo que nadie tenga la culpa, pero es probable que en el futuro (si no ya) tengamos problemas debido al desequilibrio demográfico. El envejecimiento de la población es un problema real y el sistema de pensiones corre peligro, por lo que hay que buscar alguna solución.
Esta noticia me sorprende bastante, ya que no tenía ni idea de que hubiera tantos perros hasta superar el número de niños. Aunque yo no sea muy amante de los animales, puedo entender que a muchas personas les haga compañía y les cojan mucho cariño. Lo que no entiendo es que se gasten tanto dinero en cuidados especiales como masajes anti estrés para perros, ya que ¿un perro por qué se puede estresar? Ni idea, pero bueno al final el dinero de cada uno se lo puede gastar en lo que prefiera y si dandole tratos especiales al perro, van a ser más felices que lo hagan.
Me ha sorprendido bastante que el número de perros supere al de menores de 20 años, la verdad. Sí que es cierto que las mascotas están cada día más presentes en nuestra sociedad y podríamos decir que tienen un mercado específicamente para ellas, entre los veterinarios, peluqueros caninos, masajistas y otras tantas cosas más. En mi opinión cada uno es totalmente libre de gastarse su dinero en lo que quiera, y hasta donde yo he visto hay muchas personas para las que sus mascotas suponen algo indispensable de su vida, por lo que quieren que estas tengan la mejor vida posible. Respecto a la humanización de las mascotas, me parece un problema serio. Podemos tener a la mascota como uno más de la familia, pero obligarle a adoptar hábitos contrarios a los suyos para que sea más «nosotros» me parece inhumano, valga la redundancia.
Me ha sorprendido un poco que en Asturias el número de perros sea mayor que el de personas menores de 20 años. Aunque pensándolo más a fondo, teniendo en cuenta la situación económica y social del país, es totalmente comprensible que cada vez menos gente quiera tener hijos y que más se inclinen hacia una mascota. Para mucha gente un animal es como un miembro más de la familia y la atención y el cariño que se le da es como al que se le daría a un hijo. Esta postura me parece totalmente respetable. No obstante, no me parece bien que algunos dueños que se excedan y pretendan que el animal tenga conductas más humanas. Por mucho que quieran lo mejor para sus mascotas y que sea un igual en la familia, no tienen derecho a arrebatarlos de su naturaleza animal.
La tenencia de perros como animales de compañía ha aumentado mucho en los últimos años. Es innegable que tener un perro es mucho más barato que tener un hijo, y yo creo que ese es el factor principal que ha llevado a que en Asturias la cantidad de canes supere la de jóvenes. Un perro aporta cariño y compañía, así que entiendo perfectamente que se quiera tener uno o varios en casa.
Por otro lado, el texto indica que también ha aumentado el cuidado excesivo de los animales de compañía. Ofrecer cuidados típicos de los humanos adaptados a animales es, en mi opinión, una irresponsabilidad tremenda tanto por parte de los que los ofrecen, como por la de los que los compran. No se puede tener un perro si vamos a intentar cambiar su naturaleza para que a nosotros nos haga gracia.
Creo que es una consecuencia lógica el aumento de los animales de compañía en una época en la que tener un hijo supone un aporte económico que roza el privilegio. Porque sí, las tasas de natalidad bajan y se reprocha a los jóvenes, aquellos que ni siquiera pueden pagarse un alquiler por la inflación del mercado no regulado producto del turismo. La cuestión es que un animal es mucho más barato, sí requiere una serie de cuidados y puede necesitar operaciones, pero sigue siendo más económico a la par que llena el hueco de muchas familias que no se pueden permitir hijos.
Por otro lado, resulta odiosa la costrumbre de ciertos dueños de intentar humanizar un animal cuya naturaleza no es llevar vestidos o collares con luces. Demasiado a menudo cae en el olvido que los animales no son juguetes y que tienen unas necesidades diferentes a los seres humanos.
En mi opinión esta noticia que ha ocurrido en Asturias no es más que un reflejo de algo que ocurre con mucha frecuencia en toda España y en todos los países desarrollados, hay muchas personas mayores o familias sin demasiados recursos que quieren y creen necesitar la compañía de estas mascotas que al final no son más que animales de compañía.
Además, tenemos que entender que el mantener un perro o cualquier otro animal de compañía es más económico que mantener a una persona, ya que sus necesidades son distintas a las nuestras no estoy de acuerdo con poner ropa a los perros a menos que hiciera un frío extremo, tampoco darles ese tipo de lujos porque al final son animales.
También creo que es entendible que en esta sociedad en la que estamos con las redes sociales y estamos en contacto constantemente con personas podamos sentir esa soledad que puede ser rellenada con cualquier mascota, por ejemplo los perros los cuales nos obligan a salir a la calle socializarnos con otros dueños de otras mascotas.
Esta noticia sobre lo ocurrido en Asturias no es más que algo muy común que está ocurriendo tanto en el resto de nuestro país como en el resto de países desarrollados. Hoy en día tener una mascota es lo más normal del mundo y aún más si eres alguien mayor ya que ayuda a relacionarse con otras personas y hace compañía.
Lo más sorprendente de todo esto es que el número de animales sea mayor que el número de niñ@s y adolescentes. Esto se debe a que a veces las familias no tienen sucesores porque les supone mucho esfuerzo y tiempo (el cual no pueden debido a su limitada agenda) y prefieren adoptar a una mascota por ejemplo a un perro. Pero no se dan cuenta de que tener una mascota, sea cual sea, también supone un gran sacrificio ya que hay que cuidarla y dedicarla su tiempo, lo que crea además una serie de gastos.
Por último, estoy de acuerdo de que hay animales que ayudan a las personas enfermas, como los perros guías, a personas que necesitan ayuda psicológica o han sufrido alguna situación traumática y además a l@s niñ@s les ayuda a relacionarse mejor cuando tienen algún problema.
Es comprensible que haya mascotas en las casas, son animales que pueden convivir con el ser humano y que no requieren cuidados como los animales de granja. Nos brindan su compañía y se les coge mucho cariño, ya que al fin y al cabo los vemos todos los días, son como unomás en la familia, aunque en algunas casas, por increíble que parezca, la mascota tiene casi más protagonismo que cualquier miebro de la familia.
Tengo que admitir que nunca me había imaginado que una noticia como la de Asturias pudiese llegar a ser real. Como se dice en el texto los animales de compañía ayudan a aquellos que no tienen a nadie más en el hogar a salir, dar un paseo, relacionarse con otras personas. Es decir, tener animales es beneficioso, pero si queremos tenerlos debemos de ser responsables en nuestra elección y pensar que los animales necesitan unos cuidados básicos, al igual que el resto de seres vivos.
Teniendo en cuenta la sociedad en la que vivimos, apenas me sorprende esta noticia. Hoy en día es de lo más común tener una mascota en casa, sobre todo un perro. La situación económica de nuestro país es una de las razones por las que cada vez hay más viviendas con animales. Muchas veces las personas optan por tener una mascota ya que supone un coste económico menor que criar un hijo; esta puede ser una de las razones por las que Asturias tenga más perros que menor de 20 años.
Es normal que haya un mercado que se dedique únicamente a los animales, ya que, al fin y al cabo, han acabado siendo una parte fundamental (y abundante) de nuestra sociedad. Por lo que, es entendible que haya aumentado el cuidado hacia los animales de compañía. En mi opinión, el hecho de tener una mascota significa tener el deber de cuidarla y mantenerla lo mejor posible, porque, a fin de cuentas, tienes un ser bajo tu responsabilidad.
Lo que no me parece bien es que haya personas que quieran «humanizar» a sus mascotas; por mucho que el animal sea tuyo, no está bien arrebatarles su naturaleza e intentar que se parezcan a nosotros.
No es de extrañar que el numero de mascotas de nuestro entorno (perros) se dispare de forma exponencial, no hay mas que mirar los indices de natalidad de nuestro país. Cada vez van ascendiendo mas y aunque parezca un tanto soez decirlo, la gente esta cambiando a los niños por los perros.
Esta sobre población, también viene dada ya que la gente compra perros en vez de adoptarlos. Y esto lo que esta provocando es que se críen animales sin conocimiento para sacar un beneficio de ellos.
Observando la situación desde el punto de vista de una sociedad del siglo XXI, el hecho de haber más perros que personas mayores de 20 años no es, para nada, sorprendente. Las razones que están detrás de esto son diversas, aunque, principalmente, podrían clasificarse como económicas. Cualquier familia puede permitirse cuidar y mantener un perro económicamente, dependiendo únicamente de una abundante inversión inicial y unas progresivas muestras de cariño hacia el can. Por contra, criar a un niño puede costar alrededor de 18.000€ anuales, cifra que no todos los potenciales progenitores pueden alcanzar con comodidad.
Por otro lado, tener un hijo es un plan tan a largo plazo que no tiene cabida en nuestra sociedad, una sociedad que nunca se detiene. Los jóvenes no desean «endeudarse» de por vida con una criatura que no estan seguros de saber cuidar o de poder mantener durante al menos 20 años.
Esto, sumado a mucas otras circunstancias de carácter parecido, están trayendo consigo problemas estructurales que, tarde o temprano, nos alcanzarán a nosotros y a nuestros hijos. No procrear produce un descenso de la natalidad que, en consecuencia, reducirá el número de individuos existentes en nuestra sociedad no asegurando el tan esperado relevo generacional.
Finalmente, no me olvido de esas jóvenes parejas que compran perros para familiarizarse con el hecho de criar a una criatura antes de dar el gran paso. En definitiva, los perros son mascotas fieles y cariñosas y es, entonces, comprensible que ciertas personas los prefieran a un niño.
Este artículo me ha sorprendido mucho y sinceramente, es algo que me preocupa. Aunque si bien es cierto que hay que respetar a los animales y cuidarlos, no deberían sustituir a la opción de tener hijos.
Además, creo que se está humanizando en exceso a los animales y no debemos olvidar que un animal siempre será un animal y no una persona. La intención de humanizarlos les perjudica tanto a ellos como a nosotros.
Cada vez son más las personas que viven con un animal que les hace compañía por diferentes motivos. Ahora bien, se ha hecho un gran negocio a costa de ello y muchos se están lucrando por vender vidas ajenas. Los obligan a reproducirse, y cuando son pequeños los separan de sus familias porque claro, es mucho más bonito un perro «de raza» que un perro callejero… En fin, es comprensible la subida del número de animales, en este caso perros, que hay si en vez de adoptar a aquellos que necesitan un hogar nos dedicamos a comprar. Parece que nos gusta esto de ponerle precio a la vida animal…
Por no hablar de que se les somete a prácticas que van en contra de su naturaleza como llevarlos a la peluquería y a hidromasajes. Luego hablamos de que somos seres «humanos».
A día de hoy, y cada vez con más frecuencia los animales se han convertido en una compañía indescriptible, inmejorable e inigualable para los seres humanos, y es que, en muchas ocasiones, muestran mucha más empatía, fidelidad, apoyo y cariño que las personas. Son una motivación y sin duda, una preocupación, ya que la salud y la comodidad de las mascotas pasan a ser una prioridades en los hogares. En mi opinión, hay que mimar y dar gusto a las mascotas, pero siempre teniendo en cuenta que son eso, mascotas, y no se les puede exigir nada fuera de su alcance ni pretender que destaquen por encima del resto, aunque para quien realmente siente amor, su mascota siempre sera la mejor sin necesidad de comparar.
Estoy de acuerdo con el texto, en el sentido de que cada vez hay más familias con perros que con niños. Desde mi punto de vista, esto se debe a que un niño requiere de muchos más cuidados y atención que un perro. Ademas en el caso de personas mayores, la posibilidad de tener una mascota les puede alegrar la vida, ya que no se sentirían tan solos, tendrían un entretenimiento y algo que les hiciese salir de casa.
Por otra parte, debemos de darnos cuenta de que un perro pese a que sea una mascota con la que convivimos, no deja de ser un animal. De manera que la idea de vestir a los pobres con ropas y accesorios para que vayan a la moda, me parece ridículo.
El perro es el mejor amigo del hombre. Esta frase es muy cierta, ya que los perros en mi opinión son los mejores animales de compañía. Cada vez son más las familias y personas que viven con uno de estos animales, y es cierto que las calles y parques se llenan de vida con ellos. Pero también es cierto que muchas personas los detestan o les tienen miedo, por ello es necesario que las personas que tienen perro las respeten siempre al igual que éstas respeten a los perros.
Por otro lado, creo que no se debería normalizar que haya centros estéticos para perros con baños e hidromasajes por ejemplo, ya que a pesar de que muchos dueños les traten como si fueran personas, estos no dejan de ser animales y se les debe tratar como tal.
En fin, creo que las personas que tienen perros deben respetar a las que no lo tienen y que también exista un espacio entre ellas. Ser higiénicos con estos animales y tenerlos bien adiestrados es lo principal.
Desde mi punto de vista, las mascotas son una parte muy importante de cualquier familia que las posea. Tienen una alta responsabilidad, no sólo porque haya que alimentarlas y cuidarlas para que estén sanas, sino porque también hay que saber tratarlas con cariño y amor. Lo que en algunas ocasiones se olvida es que las mascotas también aportan a sus dueños, mucho más de lo que nos imaginamos. Por esta razón, no es de extrañar que la cifra de familias con perros sea cada vez más elevada. Los perros, al igual que cualquier animal de compañía, se convierten en un miembro más, un compañero. Además, las responsabilidades que tener un perro conlleva también son beneficiosas para el propio desarrollo como personas. Tener un perro, te obliga, por ejemplo salir a pasear y estar más sano, o a que tus hijos aprendan responsabilidades gracias al cuidado que debe tener.
En mi opinion creo que el perro es el animal mas cercano a nosotros.Estoy de acuerdo con el texto de que la gente hoy en dia tienen mas perros que niños,puede ser porque el perro aunque requiere cuidados no tiene en conparacion con los que necesito un perro.Es entendible que pase esto aunque el cariño que nos puede dar un niño no es el mismo que el del perro.La gente se guía con el tiempo que se necesita para cuidarlos.Ami personalmente me gustan mas los animales que los niños,pero no especialmente por el cuidado que necesiten sino por el simple hecho que me fascinan estos.Mi caso le puede pasar a mas de una persona en vez de por el cuidado
En mi opinión cada persona es libre de tratar a los animales como les venga en gana, mientras no sea maltratándoles obviamente. Puede parecer muy fuerte o impactante el hecho de que se estén dando estos excesos de cuidado últimamente, pero sinceramente no le veo nada malo el querer tratar o que se empiece a tratar de una forma digamos “especial” a las mascotas.
La verdad es que leer esta noticia me ha sorprendido porque no sabía que fuese posible que hubiera más perros que niños o adolescentes. Bien es cierto que cuando paseamos por la calle es frecuente ver gente paseando a un perro, pero creo que desde hace unos años sí que es más común ver a ciertos dueños con más de uno. Aunque nos pueda parecer excesivo, hay quienes deciden gastar su dinero en cuidar y mimar a sus mascotas ya que les hacen muy felices.