Hallan un cachorro de lobo de 57.000 años congelado en el Yukón
Un buscador de oro ha hecho un descubrimiento extraordinario en el Yukón (Canadá), un cachorro de lobo perfectamente conservado que ha permanecido congelado en el permafrost durante 57.000 años. La excelente condición del animal, una hembra que ha sido llamada Zhùr por la gente local, ha dado a los investigadores una gran cantidad de conocimientos sobre su edad, estilo de vida y relación con los lobos modernos. Los hallazgos aparecen el 21 de diciembre en la revista «Current Biology».
«Es la momia de lobo más completa que se haya encontrado. Prácticamente está intacta al 100%. Lo único que le faltan son los ojos», dice Julie Meachen, profesora de anatomía en la Universidad de Des Moines. «Y el hecho de que esté tan completa nos ha permitido abrir tantas líneas de investigación para reconstruir su vida».
Una de las preguntas más importantes sobre Zhùr que los investigadores intentaron responder fue cómo terminó preservada en el permafrost, algo que no es nada fácil. «Es raro encontrar estas momias en el Yukón. El animal tiene que morir en un lugar de permafrost, donde el suelo está congelado todo el tiempo, y debe ser enterrado muy rápidamente, como en cualquier otro proceso de fosilización», explica Meachen. «Si permanece demasiado tiempo en la tundra helada, se descompondrá o será devorado», añade.
Otro factor importante es cómo murió la loba. Los animales que mueren lentamente o son cazados por depredadores tienen menos probabilidades de encontrarse en condiciones prístinas. «Creemos que murió instantáneamente por el colapso de su guarida», indica la primera autora. «Nuestros datos mostraron que estaba bien alimentada y que tenía alrededor de 7 semanas cuando murió -continúa-, así que nos sentimos un poco mejor sabiendo que la pobre no sufrió por mucho tiempo».
Dieta de salmón
El equipo también pudo analizar la dieta de Zhùr, fuertemente influenciada por lo cerca que vivía del agua. «Normalmente, cuando piensas en los lobos en la Edad del Hielo, los imaginas comiendo bisontes, bueyes almizcleros u otros animales grandes en la tierra. Una cosa que nos sorprendió fue que ella comía recursos acuáticos, particularmente salmón».
El análisis del genoma de Zhùr también confirmó que desciende de lobos antiguos de Rusia, Siberia y Alaska, que también son antepasados de los lobos modernos. Aunque los investigadores han obtenido muchas respuestas sobre los lobos del pasado, quedan algunas preguntas pendientes sobre Zhùr y su familia.
«Nos han preguntado por qué era la única loba encontrada en la guarida y qué pasó con su madre o sus hermanos», dice Meachen. «Podría ser que ella era un cachorro único. O los otros lobos no estaban en la guarida durante el colapso. Desafortunadamente, nunca lo sabremos».
El equipo de investigación cree posible que se encuentren más y más momias de permafrost en los próximos años. «Una pequeña ventaja del cambio climático es que vamos a encontrar más de estas momias a medida que el permafrost se derrita», afirma Meachen. «Esa es una buena manera de que la ciencia reconstruya mejor ese tiempo, pero también nos muestra cuánto se está calentando nuestro planeta. Realmente debemos tener cuidado».
Tomado de www.abc.es